ENEMIGOS

Intento frotarme los ojos y compruebo que no estoy soñando. En pleno 2012 están ocurriendo en las calles de Valencia sucesos muy graves, la vuelta a épocas oscuras de represión y cargas policiales a diestro y siniestro,  por el simple hecho de ejercer un legítimo derecho como es expresar que no se está de acuerdo con la política de recortes en la Educación Pública.
Los alumnos y alumnas del IES Luis Vives salieron a la calle la semana pasada para mostrar, de forma pacífica, su rechazo a dar clase sin calefacción, por falta de dinero en el centro para hacer frente a este gasto. Este ha sido el delito de los chavales de entre 12 y 17 años, expresar en sentadas en la vía pública su disconformidad, fuera del horario lectivo, por el ahogo económico a los centros educativos públicos valencianos que, de forma premeditada, está llevando Fabra y el gobierno de la Generalitat.
Frente a estas protestas, la Delegada del Gobierno, Paula Sánchez de León, y  la policía, bajo las órdenes del ultraderechista Antonio Moreno Piquer, han decidido hacer uso de la brutalidad más descerebrada que es imposible imaginar en una democracia, para controlar a unos menores que desean ejercer el derecho constitucional a la educación en unas condiciones de dignidad.

 Moreno, el jefe de la policía en Valencia, nos ha dado a todos en estas últimas horas una lección de  lo que no es la mesura y proporcionalidad de los funcionarios policiales a su cargo, ante protestas de alumnos con libros en las manos. Han actuado frente al “enemigo”- así ha llamado a los estudiantes del Luis Vives-, por la “agresividad de los manifestantes”. ¿¿¿???. No me lo puedo creer.
No es de recibo que tengamos en los mandos policiales y en la Delegación del Gobierno a verdaderos cafres que ejercen su cargo en contra de la ciudadanía, usando la fuerza del palo para que no se puedan ejercer libremente nuestros derechos. Los políticos y la policía están para resolver los problemas de las personas, para defendernos de la injusticia, para dar soluciones. Pero en Valencia la barbarie, el descontrol y la cacería del discrepante la han puesto Paula Sánchez de León, el ultra Moreno Piquer y el ministro del Interior que mudo consiente este descomunal despropósito.

Hoy todos somos los alumn@s del Luis Vives. Solidaridad total con la comunidad educativa de este instituto público de Valencia en Defensa de la Educación Pública.
Es necesario que se depuren responsabilidades de forma inmediata y lo primero debe ser el cese fulminante de la Delegada del Gobierno y de su jefe de policía, Antonio Moreno, por incapaces, maltratadores y enemigos de la democracia.